El mercado de comercio electrónico en Europa está experimentando un crecimiento significativo y proyecta alcanzar los 750 mil millones de dólares en 2027 (más de 700 mil millones de euros), un 21,6% más que la cifra registrada en 2023. Este sector ha sido impulsado por diversos factores, incluyendo la alta penetración del comercio en línea en las principales economías y el crecimiento de usuarios.
Según un informe de ECDB, el 62% de los consumidores en Europa utilizaron canales de compra online en 2022, y las principales economías de Europa, como Noruega, el Reino Unido, Alemania o los Países Bajos, ya tienen tasas de penetración de alrededor del 80% o más. Sin embargo, aún queda un vasto potencial por aprovechar en economías más pequeñas del sur y este de Europa, como Grecia, Portugal y Polonia.
En los años 2020 y 2021 los ingresos se dispararon, ya que el eCommerce tuvo un fuerte impulso en la pandemia. Eso también explica la baja que se produjo en 2023, cuando la situación del Covid se estabilizó y la gente volvió al comercio físico.
Pero, más allá de estos vaivenes, los ingresos del comercio electrónico europeo muestran una tendencia sólida de crecimiento: desde 2017 hasta la fecha aumentaron más de un 147%, pasando de los 308.600 millones de dólares a los 621.600 millones. Y si tenemos en cuenta la proyección para los próximos tres años, los ingresos aumentarán un 21,6% hasta 2027, pasando de los de los 621.600 millones de dólares en 2023 a los potenciales 756.200 millones de dólares en 2027.
Cada vez hay más compradores en línea
El aumento de los ingresos va de la mano con un mayor número de usuarios de comercio electrónico B2C, que ha seguido una trayectoria ascendente constante desde 2017. En 2017, había 390 millones de usuarios y esta cifra aumentó a 540 millones a finales del año pasado, un 38,4% más. Los pronósticos sugieren que el crecimiento continuará: se esperan 552 millones de usuarios en 2024 y hasta 586 millones en 2027, lo que supondría un crecimiento del 8,5%.
